Las cosas no se hacen de forma aleatoria, vivimos para hacer de este un mundo mejor para todos, y no vale solo con decirlo, hay que aportar algo más que palabras, y así nació Machill.
Mi primer granito de arena para cambiar el mundo.
La idea de esta marca era juntar las estrellas y las palmeras en un sentimiento de libertad representado en la ropa. En un principio las camisetas iban a ser como la que podemos ver a continuación, pero realmente me parecía algo imposible de hacer.
Tras darle muchas vueltas intenté buscar una solución sencilla, pues me gustaba tantísimo el nombre que me resultó muy divertido ir todo el verano haciendo propaganda de MACHILL por España, hacernos fotos.., y realmente poner en práctica todo lo que había aprendido estudiando hasta entonces.
Es precioso que todos seamos diferentes, que en el mundo no haya dos personas iguales, y que en el fondo no seamos tan distintos, por lo que saqué a la luz la primera línea de camisetas MACHILL basándome en lo nombrado anteriormente, en la canción “where is my mind” de Pixies, en la naturaleza y en el tie-dye.
Para el invierno decidí continuar creando unas playlist para mejorar el engagement con mis seguidores y haciendo un concurso semanal de adivinar la canción en Instagram.
Por otra parte saqué una línea de sudaderas con las letras de MACHILL bordadas y con un tie-dye en degradado.
Por último, para el siguiente verano y cerrar esta pequeña aventura, decidí sacar una última línea, de exclusivamente 3 camisetas con las letras de MACHILL bordadas y con un dibujo muy personal en la espalda.
Me gustaría desde aquí dar las gracias a toda la gente que me apoyó en este viaje. Sin ellos no habría sido posible aportar mi granito de arena a cambiar el mundo. Por todo ellos se convirtieron en la familia MACHILL.
GRACIAS.